A Miguel Fisac, arquitecto innovador, inconformista y polémico se le conoció especialmente por el corte moderno y vanguardista de sus iglesias. Para los que vivimos en Madrid quizá su iglesia más popular sea la de los Dominicos de Alcobendas, de 1955. Y posiblemente la menos conocida la del Espíritu Santo en la calle Serrano 127, de 1942, obra que dio inicio a su carrera de arquitecto.
Al terminar la guerra civil española el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, surgido de la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (1907-1939), se hizo cargo de las instalaciones de la Residencia de Estudiantes y el recién creado Instituto Nacional Ramiro Maeztu del Instituto-Escuela. La primera obra que se emprende es la construcción de la capilla sobre las ruinas del Auditorio de la Residencia de Estudiantes, obra de los arquitectos Arniches y Martín Domínguez, y que fue uno de los puntos de mayor importancia cultural de Madrid de los años treinta. A esta capilla el nuevo régimen le dió un valor simbólico, de acuerdo a sus concepciones culturales y religiosas.
El proyecto fue realizado por Miguel Fisac, miembro del Opus Dei en aquel momento, que aprovechó parte de los muros del Auditorio para la construcción del templo. El nuevo edificio es de concepción racionalista y sus fachadas en ladrillo visto tienen un cuidado diseño y ejecución, no obstante y como concesión inevitable a las circunstancias históricas del momento se ornamentó y compuso con elementos tradicionales de la arquitectura española (regionalismo). Posteriormente se construirían, obras también de Miguel Fisac, el Pabellón Central del Consejo, el Instituto de Edafología y el Instituto de Óptica.
Si comparamos las imagenes de la actual iglesia del Espíritu Santo (foto inferior derecha) con lo que fue el pabellón Auditorio-biblioteca de la Residencia (foto inferior izquierda), todavía se pueden reconocer algunos elementos originales de la construcción primitiva. El trabajo de Fisac, dentro del cambio radical de uso del recinto mantuvo la esencia racionalista que tenía el edificio. Fue el adiós definitivo al proyecto de Carlos Arniches Martín Domínguez que formó parte de otros dos pabellones inmediatos del Instituto Escuela.
1.Instituto Ramón y Cajal de Microbiología 2.Instituto de Química Orgánica, C/ Juan de la Cierva,3 (1963-64) 3.Centro de Información y Documentación del Patronato Juan de la Cierva,C/ JOAQUIN COSTA, 22 (1961)
4.Centro de Investigaciones Biológicas del CSIC, C/ VELAZQUEZ, 144 c/v C/ JOAQUIN COSTA, 34 (1951) 5.Edificio central del CSIC, C/ SERRANO, 117 (1942)-Ricardo Fernández Vallespín , Miguel Fisac Serna-
Edificio Vega, C/ VELAZQUEZ, 157 c/v Av DOCTOR ARCE (1966)
Los Laboratorios JORBA (La Pagoda)
Miguel Fisac diseñó y ejecutó una gran cantidad de edificios, pero sin duda el que más popular le hizo fue el conocido como «la pagoda«. El edificio era la sede de los Laboratorios JORBA y se construyó ente los años 65-70. La polémica y el horror llegaron en 1999 cuando los nuevos propietarios del edificio, en connivencia con el Ayuntamiento de Madrid determinaron derribarlo.
«Este edificio fue construido para albergar la producción, el almacenaje y las dependencias administrativas de los laboratorios farmacéuticos Jorba. La organizacióngeneral del complejo se hizo de tal manera que los recorridos internos se redujeran al mínimo. Una torre exenta, en el extremo más próximo a la calle, reunía las diversas dependencias de administración y una biblioteca. La zona de producción y almacén sedisponía en dos naves rectangulares de planta libre y de gran luz, cubiertas a dos niveles distintos La estructura de las cubiertas de esta parte del edificio consistía en el uso de un modelo de viga patentado por el mismo Miguel Fisac. El diseño de elementosestructurales ocupó a Fisac durante mucho tiempo y de su estudio salieron diferentes patentes de vigas que basaban su solución en los principios estructurales de los huesos largos: láminas formando tubos con unas secciones parecidas a las vértebras. El sistema consistía en piezas de hormigón prefabricadas que se montaban en obra y se tensaban después. La apariencia resultante es la de una losa nervada. Diferentes modelos de «vigas hueso» daban respuesta a problemas de techos de grandes luces, desagüe de cubierta y formación de lucernario para naves industriales, iglesiaso casas particulares. La falta de interés y la negligencia por parte de las administraciones públicas locales hicieron posible que en 1999 una operación inmobiliaria provocara su derribo, lo que levantó una enérgica protesta por parte demuchas personas que veían en esta construcción un representante de la mejor arquitectura española de su época. Pero ni las voces más autorizadas pudieron evitar la acción de la piqueta, que acabó con él.»
Referencias.-
Miguel Fisac (Francisco Umbral)
Urban Idade 
Agradezco en especial que hayas colgado ese material gráfico del auditorio que precedió a la iglesia del Espíritu Santo (donde, como alumno del Ramiro, hice mi Primera Comunión). Conocía el hecho, pero nunca había visto cómo era. Tampoco recordaba, si es que aún subsistía cuando fui alumno del Ramiro (años 1964-1967), la bonita portada de acceso al recinto. Gracias por recordar todo eso, junto con la admirable labor de Fisac y el desaguisado, nunca demasiado lamentado, de la Pagoda.
La destrucción del patrimonio arquitectónico heredado es una «destrucción pacífica», fría y premeditada, que se produce con desprecio de valores que a la comunidad toda pertenecen y, cuya responsabilidad primera corresponde a las instituciones competentes, ya sea en Madrid o en Murcia, que sistematicamente han renunciado a su protección, incumpliendo las normas que en esta materia desde el siglo XIX se han venido sucediendo.
He visto por casualidad una foto del edificio Pagoda y me he quedado fascinado de su forma, diseño.
Es precioso, no se como se pudo derruir este edificio. Hagamos algo para que esto no vuelva a ocurrir. Que pena.
Un saludo,
mi incuriosisce questo architetto e su amazon o ebay non riesco a trovare pubblicazioni disponibili. grazie di aver raccolto queste informazioni e queste immagini!
matteo
Caro Matteo, in effetti è un architetto assai rilevante nell’archietttura spagnola della seconda metà del Novecento, un vero innovatore sia sotto il profilo tecnico che sotto quello estetico.
Fa piacere che anche in Italia ci si incuriosisca per la sua opera.
El año pasado visité El Centro Hidrógráfico, este año la Iglesia de Sta. Ana y la Esperanza, y estoy interesada en saber todo sobre su obra
Y he de decir que siento una gran decepción por ver el edificio de la pergola, que fue derribado, es una de esas aberraciones que se hicieron, y pienso que para Fisac una gran decepción hacia el valor de su obra.
Espero que esto se tenga mucho mas en cuenta para que no se destruyan edificios de tanto valor arquitectónico.
¡Que burros son nuestros politicos! ¡que poca sensibilidad arquitectonica!
Completamente de acuerdo.
En la avenida de América, yendo hacia el aeropuerto de Barajas, ese extraño edificio era el colmo de la modernidad en los años 1970, ese edificio redondo con pinchos que nos abría la imaginación hacia otros mundos y futuros posibles.
Sugerencia : Tal vez se podría hacer alguna maqueta de homenaje en el Colegio de Arquitectos o incluso en el Museo Municipal de la Historia de Madrid, como modesto desagravio.
Ese edificio tan singular lo echo mucho de menos siempre que paso por allí. Yo lo veía entonces con ojos de niña y me admiraba porque en él veía reflejado el maravilloso futuro que nos esperaba en lo que era entonces el distante año 2000: viajes espaciales, robots, etc.
Gracias por publicar esto, Tenía cerebro, En Argentina pasó lo mismo, busquen la Casa Puente, y el Parador Ariston, y la Catalano House, en North Carolina, obras emblemáticas para todos!!!
No es de extrañar que «La Pagoda» no estuviese protegida porque nuestros políticos solamente están interesados en el poder y no en la mejora cultural de España.
Cuando éramos niños (primeros años 60) pasabamos parte del verano en la casa de mi abuelo Joaquín Esteban Esteban, maestro de obras, en la calle Goitia 9 de la Ciudad Lineal. De vez en cuando, para romper la monotonía, hacíamos una excursión andando a la «pista de Barajas» como se llamaba a la autoría o, incluso, en la camioneta al aeropuerto a ver aterrizar y despegar los aviones desde la terraza de la terminal. En esos paseos siempre le preguntaba a mi abuelo por el edificio «chino» que me llamaba poderosamente la atención. Mi abuelo se detenía, lo contemplaba con admiración y me decía que era extraordinario el sistema que habían empleado para realizarlo y comentaba cosas sobre el cemento que yo no entendía. Cuando me entere de su derribo tuve una mezcla de ira por la estupidez y avaricia de los responsables y pena por haber perdido una imagen de mi infancia. Siempre la pagoda y mi abuelo Joaquín en mi recuerdo
Javier Bandres