
Hace unas tres semanas que el cine Morasol, situado en la calle Pradillo, 6 de la Prosperidad, no abre. Era el último cine del barrio y de sus alrededores que permanecía en activo. Se inauguró en el año 1964, cuando todavía acudir al cine el fin de semana era una de los entretenimientos más populares en todo el país. En la programación de sus primeros años se proyectaron películas como El circo,con Cantinflas; El Vampiro de Düsseldorf, de Fritz Lang; diferentes títulos de la saga del Zorro; El joven Winston, de Richard Attenborough ; etc.

En la Prosperidad el Morasol convivía con los cines López de Hoyos (antes salón Moderno), el Cinestudio Covadonga y el Royal, todos ellos en la calle López de Hoyos. En la misma calle, bastante más arriba se encontraba el cine Ciudad Lineal. Cerca de la Guindalera, pero también competidores del cine Morasol, se encontraban el Bahía, el Mónaco y el modernísimo Marvi, los tres en la calle Cartagena.

Hacia Chamartín, en la calle General Mola (Príncipe de Vergara) estaban los cines Roma y el Juan de Austria.
En su momento, la apertura del cine Marvi, en la calle Cartagena casi esquina Avenida de America, desbancó a los que salpicaban López de Hoyos. Este cine, abierto en 1958, fue durante los 60 el más moderno de la zona. También tenía programas dobles y al estar a mitad de camino entre el barrio de Salamanca y los de la Guindalera y la Prosperidad, competía con el Oraa y con el Silvela, a la vez que con el Lopez de Hoyos, con el Covadonga y con el Morasol.
El Marvi desapareció en 1980 y comenzó a funcionar como bingo -Sala América- hasta el año 2008 que cerró definitivamente. En los bajos del cine Marvi estaba la sala de fiestas “El Cisne Negro”.

La década de los ochenta del siglo pasado fue nefasta para los cines, especialmente para las grandes salas que eran incapaces de completar su aforo, a pesar de estrenar las producciones más atractivas del mercado. Muchas salas se reconvirtieron en minicines y aguantaron hasta donde pudieron. Los cines grandes de los barrios se transformaron en bingos y en salones de bodas y banquetes y , ya en la década de los noventa, algunos mutaron en gimnasios, como el Roma o el López de Hoyos. De los cines pequeños que no continuaron su actividad la mayoría se transformaron en supermercados de grandes cadenas o en franquicias de ropa.

En 2006 una reforma del Ayuntamiento por la que las salas podían cambiar su uso urbanístico, con las salvedades de que los edificios que gozasen de protección urbanística tendrían que asegurar la conservación de sus elementos arquitectónicos y culturales, y que los nuevos usos del inmueble tendrían que ser compatibles con la integridad de palcos, tramoyas y escenarios, posibilitó el cierre de muchas salas que aún funcionaban.
Este cambio en la legislación unido al hecho de que la mayoría de los cines pertenecían a unas pocas sociedades, produjo que estas cerrasen las salas casi de forma conjunta con la intención de sacar partido a las plusvalías que generaba la recalificación.

El cine Morasol también sufrió la crisis de los ochenta y en febrero de 1980, cuando exhibía el Secreto del Toisón de Oro y Una Tarde en la ópera, de los hermanos Marx, en sesión continua al precio de cinco duros, el mismo mes que en el cine Gran Vía se estrenaba Mad Max, echó el cierre.
En 1982 volvió a abrir, esta vez no como cine sino como sala de conciertos, aunque mantuvo su nombre (Sala Morasol). Sin embargo, a pesar de convertirse en un referente de la “movida”, junto con la sala “Marquee” y la sala “Rock-Ola”, los antiguos cine Bahía y Mónaco, las numerosas denuncias de los vecinos y las continuas molestias que el público que acudía al local generaba en el barrio durante las madrugadas, obligó a su cierre en junio de 1984. (La sala Morasol llegó a ser una de las más conocidas y frecuentadas por la gente joven madrileña, y fue lugar de conciertos de los grupos más famosos del panorama musical español de los ochenta. La Morasol, como se la conocía, carecía de licencia de instalación, apertura y funcionamiento, además de superar ampliamente, según los técnicos municipales, el nivel de decibelios permitidos, lo que originaba la transmisión de vibraciones y ruidos molestos a los vecinos-.El País, 9 de junio de 1984).


Pero, como el Ave Fénix, en 1997 el Morasol resurgió de sus propias cenizas y abrió de nuevo como cine multisalas, ligado a la sociedad Exhibidores Unidos del empresario valenciano Bautista Soler, propietaria también del Juan de Austria y que llegó a tener 40 salas de cine en Madrid capital.
El Juan de Austria cerró en 2007 al amparo de la reforma del Ayuntamiento de Madrid, y transformó el antiguo cine en un Open Cor, ahora también cerrado y en una sala de ensayo de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.
El cine Morasol, aguantaba como multicine de seis salas, hasta hace unas tres semanas. Pero, desde entonces no ha vuelto a abrir. Y parece que esta vez va a a ser el adiós definitivo del último cine del barrio de la Prosperidad.
ACTUALIZACIÓN 2016: el 27 DE OCTUBRE DE 2016, el antiguo cine Morasol volvía a abrir, con mínimas reformas, rebautizado como Cines Conde Duque Auditorio.
Referencias.-
El crepúsculo de las salas (El País, 2013)
Sin grandes cines en las calles de Madrid (Revista Profesiones, 2007)
Salas de cine: Morasol (Estudio de arquitectura López-Izquierdo)
«The end para el cine de barrio«. Cine Marvi. (El País, 23/03/2012))
Los cines Renoir de Cuatro Caminos echan el cierre (El País 30/09/2013)
Gracias por evocar esos recuerdos de adolescencia, juventud y programa doble los Domingos…………..y paseos por el Parque Berlin.
Lamentablemente cierran cines.. todos los cines del barrio… del distrito.. una verdadera pena..el cine Roma… Juan de Austria, Marvi… una pena..
El otro día descubrí en el Versión Original (bar de copas de Sánchez Pacheco) varios carteles originales de la programación del antiguo cine Covadonga. Pensé en hacerles una foto pero estaba muy oscuro. Tenían uno con el estreno de El IMperio Contraataca…
Hola: Mas repasos a la adolescencia. Aunque yo era mas del Roma y Juan de Austria ( antes cine exclusivo de los americanos de la Base de Torrejon), porque vivia más cerca de ellos, tambien iba al Morasol, según el programa que echasen.
Ah! Yo tambien pertenezco a la Madroñosfera.
http://fotoblog-madrid-josamez.blogspot.com.es/
Un saludo.
Vale, te pongo en la lista.
Un saludo.
Hola Enrique.
Dicen: «Tiempos pasados fueron mejores». ¿Qué absurdo, no?.
Los que no han vivido ni conocido… son unos ignorantes de nuestro pasado y de sus lugares.
Tardes y noches de cine en los cines del Barrio: «pipas, dos películas NO-DO e ilusiones que no volverán».
Un abrazo.
ah! mi viejo barrio! te faltó el cine Roma, en la plaza de la República Dominicana, (ahora un gimnasio) donde aprendí a hacer manitas y otras cosas propias del candor juvenil. Los domingos tenían sesiones de tres películas por veinticinco pesetas (años 70 del siglo pasado) con ambiente felliniano de barrio. Saludos!
¡Que depresión! Había pasado últimamente varias veces delante de es cine, y me parecía un milagro que siguiese abierto. Como una reliquia del pasado que se resiste a desaparecer.
Hola Fidel,estas seguro de que el Morasol se inaugur en el 64?.Yo viv en Lpez de Hoyos desde el 59 al 61 y jurara que en los ltimos tiempos el Morasol ya estaba,aunque si es cierto que yo sola ir al Covadonga y a ste no fu nunca,me puedo equivocar.Un saludo Date: Sun, 19 May 2013 16:29:56 +0000 To: marisegarciamolina@hotmail.com
Me han jodido pavino cerrando el Morasol. Ya lo hicieron cuando cerraron el Juan de Austria, pues vivo al ladito……pero a Morasol le tenía un cariño especial, ahí vi a Nina Hagen en los 80s. Que pena.
…me faltan el cine Victoria y los cines Dúplex de Gral. Oraá…
he leido que antes de acabar el años 2016 abrira de nuevo el cine Morasol, algo remozado
Este cine se ha olvidado de las personas con discapacidad, no hay nadie de los trabajadores que pueda explicar donde esta el acceso, porque no existe.
que recuerdos del cine Morasol, muchas y muchas veces pasaba la tarde entera viendo películas, me llevaban mis vecinas un poco mayores que yo y cuando se hizo sala de conciertos creo que es donde disfrute de mi primer concierto, Culture Club; me llevó mi amigo Palao y lo recuerdo como si estuviera allí.